Reynaldo Sanchez somete a la justicia alcalde de Bonao y a su director de cultura

 Sin lugar a las dudas, si hay un miembro de quienes componen a Cocabo, que estás descalificado para dirigir el Carnaval de Bonao, se llama Reynaldo Sanchez,  las astrocidades que en nombre de la cultura ha generado incluyendo actos delincuenciales, empoderan de manera automática a la membresía a sancionarlo de por vida de la institución.

Reynaldo Sanchez,  en su afán de vender una imagen plástica a un sector de la sociedad que dice creer en el, esta poniendo en juego su oscura forma de engaño la que iluminará para provocarse una caída estrepitosa y en la búsqueda de su propósito, está cayendo en lo ridículo lo que no les estás quedando bonito.

Con mira a lograr su propósito está recurriendo al chantaje e incluso a desafiar a sus autoridades notificandoles con acta de alguacil falsa y mal infundadas notificaciones para que comparezcan en los tribunales algo propio de una persona sin asesoramiento.

Reynaldo Sanchez,  en su afán de enaltecerse está sufriendo un gran desgaste en la sociedad cultural pues hay realidades de las que jamás podrá despojarse y tanto da una gota de agua sobre una piedra, que al final la rompe.

Es lamentable que autoridades como el Senador Felix Nova Paulino, se éste dejando utilizar de quién ha venido demostrando no tener la capacidad mental para manejar ciertas situaciones al menos, que éste no le esté haciendo el juego para empujarlo al abismo.

Reynaldo Sanchez, sabe que en esta sociedad,  no puede escupir para arriba pues sus actos delincuenciales están ahí y no es bueno que el mismo lo remueva enfrentando sectores con la suficientes calidad moral para enfrentarlo en el terreno que lo deseé.

Este afán de Reynaldo, de querer asumir la dirección del Carnaval de Bonao,  por encima incluso del mas del 85% de la matricula de la institución nos indica,  que estamos frente a un desquiciado mental, no es posible que una personal sin moral ni credibilidad alguna en Bonao, desafíe a un alcalde soberanamente elegido por un pueblo e incluso prohibirle ejercer sus funciones en cuando al ordenamiento de lo que le compete, eso es como estar decidido a usted caval su propia tumba.