Sin lugar a las dudas, una gran parte de la
municipalidad de Monseñor Nouel, tiene depositada su esperanza en el candidato a
senador del PRM, Héctor Acosta, /El Torito/, una esperanza fundamentada en que
hay que quitar el que está para poner otro sin tan siquiera ese otro tenga
propuestas políticas factibles.
Desde que Héctor Acosta, resultó señalado por
la dirección del PRM, éste no ha sabido asumir con responsabilidad tal promoción,
a los fines inspirar confianza en mayoría de electores y quienes buscan en sus legisladores,
transparencia, armonía, motivos satisfactorios y de orgullo de tenerlos en tal posición.
Mañana domingo 15 de marzo, serán las
elecciones municipales en la República Dominicana, el candidato a senador del
PRM, por la provincia Monseñor Nouel, de
no ser por el virus que hoy ataca al mundo, éste estaría en una tarima
cumpliendo su compromiso empresarial sin importarle en nada la suerte que
corran sus conciudadanos dentro del complejo proceso eleccionario por el que
travesaran.
Ese es el candidato a senador que nos busca presentarnos
en el Congreso Nacional, a quien parece no importarle la suerte de su país de
su provincia, de su pueblo y de su gente.
El propio destino nos viene mostrando,
que con un legislador como el Torito, Monseñor Nouel, se iría al abismo visto, el que en éste, sólo impera un capricho /Ser Senador/, sin tan
siquiera tener el empeño de formular un programa sostenible para su propia candidatura.
De tener el Torito, responsabilidad política, compromisos
con su provincia, inmediatamente fue señalado por la dirección del PRM, debió
regresar a Bonao a construir su plataforma, solidarizarse con sus principales
problemas sociales para de esa manera convencer a quienes como yo, buscar ver
desarrollar su comunidad.
Suerte al Coronavirus, vamos a tener en Bonao,
al candidato del PRM, defendiendo de ahí, ahí, el voto de sus alcaldes y
regidores, dándole calor a los delegados de su partido, aportándole logísticas
a los dirigentes para que lleven a su gente a votar.
¿Es éste el Legislador que queremos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario