Ha estado resultando
improcedente, el que una de las mejores voces del merengue en la Republica
Dominicana, como la de Héctor Acosta, se encuentre en estos momentos tomando un
declive hacia el precipicio.
Pareciera en el ambiente, que este grupo nunca haya existido pues su
presencia se ha visto opacada luego de sus fallidos intentos de sus
aspiraciones políticas y sin la capacidad intelectual requeridas a la senaduría por su pueblo Bonao al
grado, que muy poco hacen mención de la
orquesta de Héctor Acosta, muy pocos por no decir nadie solicita en la radio o la disco, un tema de este renombrado artista.
Sus temas en la radio nacional ya
no suenan con la insistencia de sus inicios pues pareciera que se le haya
aplicado el dicho aquel de que “Hasta la Belleza Cansa”, a pesar de las
diversidades y perfectas entonaciones
que este interprete le coloca a sus temas, quizás por creerse estrella e intentar brillar con
luz propia su fuente de energía exploto llevándolo todo a ceniza.
Héctor
Acosta, debe retomar su carrera y hacer lo que sabe hacer cantar y poner a
bailar a sus gentes, el ambiente internacional
da el dinero suficiente para sustentación pero las raíces, que han sido el soporte de su carrera es su
pueblo, el que por intentar hacerlo
llorar después de haberlo hechor reír y bailar tanto hoy al tomar este la seña pareciera
le este dado la espalda.
Sin
mucha bulla la orquesta de Héctor Acosta, esta en silencio tanto, que en las
evaluaciones de los premios El Soberano, muy pocos la recordaban tanto así,
que aparece en el listado de nominación
de una manera muy tímida pues su labor durante el pasado año 2013, no fue de
las mas relevantes pues solo se abstuvo a realizar alguna mas que otras fiestas
de multitudes, nada relevante que merezca un premio Soberano.
Ya
decimos, Los Premios de Acroarte, son las maldiciones de los artistas
nacionales, su fama y soporte en el ambiente de la farándula, tienen un corte
en el mismo momento que estos levantan la estatuilla.
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