Simple:
Con el CORONAVIRUS una vez más
queda demostrada la fragilidad de la raza humana, otro gran desafío para la
inteligencia científica medica.
Por la cantidad de infectados y
las muertes imparables está evidenciado, que no vamos en el camino correcto y están
llegando avisos contundentes de que no estamos por encima del bien y el mal, es
hora de reorientar la conducta humana.
Reflexionemos y seamos más
humildes, más solidarios, más sensibles, más cercanos a Dios y menos malos,
menos MATERIALISTAS, más espirituales, tengamos más profundos sentimientos de
amor, menos avariciosos y agiotistas, meno violencia, menos maltratos, más
respeto, más paz y mucho más busquemos de Dios.
Piensen y cambien la ruta maligna
y ese estilo de vida endiablado por don dinero que divide familias y
está matando la sociedad, que una vez más nuestro JESÚS DE
NAZARET, se apiada de su mundo y que nosotros entendamos este nuevo
mensaje del CORONAVIRUS.
BENDITO SEA DIOS Y BENDITO SEAN TODOS
USTEDES.
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