Con referencia a un criterio externado por el Licenciado Arquímedes Luna, sobre los nuevos licenciados en comunicación social que dentro de algunos meses se integraran ya con un titulo en la materia a la delicada tarea del periodismo, me llama mucho la atención cuando tengo que monitorear los diversos programas de radio y televisión de la localidad como critico y presidente del “Premio Farándula del Año”, y ver en estos tantas mediocridad en mi compañeros de profesión.
Da mucha pena ver estos Bachilleres Universitarios expresarse en los medios de comunicación tan desordenados en su léxico, pena en irse a la televisión sin ningún tipo de creatividad solo hacer lo que ya otros han estado haciendo y sin criterio alguno repitiendo como copia al carbón los mismos temas y, en mucho de los casos desconociendo hasta el contenido de los temas que tratan.
Hay algunos de estos colegas, que a veces ni se preocupan por asistir a los eventos y los podemos ver haciendo críticas sin propiedad, solo porque un carajo a la vela le dijo que en tal parte ocurrió algo o que ocurrió tal sucesos, van vacíos a los espacios a costa de que alguien le haga una llamada telefónica y así acabar con medio mundo.
Realmente algunos culpan el mo
dernismo de haber traído esta debacle, este daños al periodismo local, y no es así, los culpables son los dueños de los medios de comunicación que no evalúan a su cliente ante de rentarle un espacio de radio o televisión y como no alcanzan tener una buena facturación porque al receptor no le interesa en lo mas mínimo lo que dicen o comentan porque son bocina repetidoras entonces, incurren al chantaje periodístico.
Los gremios periodísticos que tenemos entiéndase Colegio Dominicano de Periodistas, (CDP), Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa, (SNTP) ni tan siquiera, la Asociación de Periodistas Profesionales, (APP), se esfuerzan para tener una diáfana profesionalización de sus miembros y estos a su vez hagan el esfuerzo para que la comunidad se interese por leerlos por verles en la televisión o escucharle en la radio no como copias ni bocinas repetidoras sino como verdaderos profesionales de la comunicación social, con sus propios comentarios, sus propios análisis.
Debo decir que no son todos pero de los cinco dedos de una mano sobran algunos lo vemos en la farándula, en los deportes, en cronistas y analistas que irrespetan a su público al no expresar criterios propios sobre tal o cual tema o evento, solo lo que opinan los profesionales de verdad y los que ellos copian.
Saben ustedes amables lectores que de continuarse con el periodismo de Bonao, como va muy pronto le llegara la hora de escribirle su ( E.P.D.) al periodismo de la provincia Monseñor Nouel.
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