LOS POLITICOS NO TIENEN MORAL PARA DECIRLES "NO A LA RELECCION"

Enviado a nuestro Correo Electronico
Por: Rafael Aragonés López
Comunicador Social, Político.

La Constitución de la República Dominicana, también conocida como Carta Magna, que viene del latín cum y statuere, es: La norma, modelo, patrón, pauta, ley fundamental del Estado dominicano, instaurada para regir sus leyes, sus nacionales y gobernantes. Nuestra primera Constitución consta del 1844 y desde entonces ha sido modificada innumerables veces (38), con el propósito de acondicionarla a los nuevos tiempos y necesidades de nuestro pueblo, y por supuesto, para mejorar la calidad de vida de los dominicanos.

La realidad es, que “la moneda tiene otra cara”, los gobiernos que han administrado nuestro estado, léase los partidos políticos, han modificado, transformado, retocado y hasta disfrazado la verdadera intención de los mismos al reformar la Constitución.

Los tres partidos que hemos gobernado en los últimos 50 años (PRD, PLD Y PRSC) en una supuesta democracia representativa (porque no hacemos otra cosa que representarnos a nosotros mismos) hemos enfocado estas reformas constitucionales en hacer los llamados trajes a la medida, buscando la fórmula constitucional para continuar en el poder.

El tema de la reelección presidencial está en el tapete, nuevamente, todo el mundo emite su opinión, y la verdad es que ninguno de los partidos políticos, por lo tanto sus militantes, tenemos moral o argumento alguno para refutar, contradecir u objetar el tema. Pues todos, sin lugar a la excepción, hemos apoyado de manera directa o indirecta la reelección presidencial. Pero no crean que los políticos de izquierda están libre de culpa, lo cierto es que, ellos predican sus políticas de estado tomando como referencia mandatarios que se han hecho viejos en el poder (que viva Cuba!), y los últimos de estos líderes han modificado la Constitución para esos fines (saludos a Chávez).

Actualmente, un sector muy importante del partido de gobierno se empeña en presentar el actual Presidente de la República en un tercer período de gobierno, lo que representa una reelección, aunque para algunos del mismo partido, es simplemente muy arriesgado políticamente hablando (que simplistas). Nos vanagloriamos de ser demócratas, pero en realidad nuestros intereses y la ambición de poder nos manipula y nos hace la clase menos cumplidora y más mentirosa.

Por tanto, la sociedad civil tiene la encomienda de hacer cumplir la Constitución Dominicana, que tanta sangre y sacrificio nos ha costado, solo la sociedad civil tiene moral para reclamar los derechos y deberes constitucionales. Espero que esta encomienda no sea una carga pesada, porque los políticos no tenemos moral para decir “no a la reelección”.
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