Vimos una campaña en las redes sociales en procura de donaciones para pagar los funerales de la cantante Verónica Medina…
Otra figura del arte que al morir, hay que acudir a la caridad pública para enterrarlo.
Sucedió recientemente con El General Larguito y Luis Kenton….
¡Qué destino!
Es la triste realidad… lo que subyace detrás de las escarchas, las lentejuelas y las apariencias…
La cantate Verónica, ex integrante de Las Chicán, vivía en condiciones muy humildes, tanto así que ni recursos propios ni de familiares han aparecido para sus funerales, y se ha tenido que recurrir a una campaña pro recaudación de fondos.
¿Y el Ministerio de Cultura y su nuevo incumbente? Por lo menos en la gestión de José Antonio Rodríguez se pagaron operaciones de varios artistas y los funerales de otros…
Pero en ese “espejo rojo” deberían mirarse muchos artistas banales, cursi, que se quieren llevar el mundo por delante porque han conseguido tres cheles.
Que malgastan y dilapidan todo el dinero que ganan creyendo que con ello aprovechan al máximo “su cuarto de hora”.
Y la realidad golpea, duro, muy duro…
¡Qué destino!
Es la triste realidad… lo que subyace detrás de las escarchas, las lentejuelas y las apariencias…
La cantate Verónica, ex integrante de Las Chicán, vivía en condiciones muy humildes, tanto así que ni recursos propios ni de familiares han aparecido para sus funerales, y se ha tenido que recurrir a una campaña pro recaudación de fondos.
¿Y el Ministerio de Cultura y su nuevo incumbente? Por lo menos en la gestión de José Antonio Rodríguez se pagaron operaciones de varios artistas y los funerales de otros…
Pero en ese “espejo rojo” deberían mirarse muchos artistas banales, cursi, que se quieren llevar el mundo por delante porque han conseguido tres cheles.
Que malgastan y dilapidan todo el dinero que ganan creyendo que con ello aprovechan al máximo “su cuarto de hora”.
Y la realidad golpea, duro, muy duro…
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