Sergio Vargas está pensando cortarse el cabello dado que ya no tiene caso seguir pidiendo por un pueblo que le dio la espalda. Dicen esta quillao.
Anda Pal Carajo, ahora resulta que Sergio Vargas está inconsolable, pañito blanco en la mano y moco de la nariz para fuera es mas, ni sus más allegados han logrado sacarlo de la tristeza en la que se encuentra sumergido luego del que el 16 de mayo le dieran para afuera de la Cámara de Diputados donde no logro la mayoría de votos para seguir en su curul.
El merenguero ha recurrido, abatido, botellita de agua en mano a sus viejos amigos, para junto analizar las causas que provocaron su derrota en estos comicios, mucho más sabiendo Villa cómo él ama su terruño y a su gente a los que hace presentes en cada uno de sus merengues.
Una fuente de entero crédito reveló que Vargas está tan disgustado con sus compueblanos por no haberle dado los votos ganadores que hasta ha llegado a pensar en mudarse de Villa Altagracia vender los perros y no hacer alusión a su gente en sus tradicionales merengues.
La fuente dijo además que Sergio está dolido con los suyos, y ha dicho que ellos lo maltrataron al no darle la preferencia y hacer que se quedara seis años más en su puesto como diputado, un puesto que, a su entender, solo utilizaba para conseguir que Villa tuviera buenos proyectos.
Según la misma fuente, Sergio Vargas está pensando cortarse el cabello dado que ya no tiene caso seguir pidiendo por un pueblo que le dio la espalda.
Anda Pal Carajo, ahora resulta que Sergio Vargas está inconsolable, pañito blanco en la mano y moco de la nariz para fuera es mas, ni sus más allegados han logrado sacarlo de la tristeza en la que se encuentra sumergido luego del que el 16 de mayo le dieran para afuera de la Cámara de Diputados donde no logro la mayoría de votos para seguir en su curul.
El merenguero ha recurrido, abatido, botellita de agua en mano a sus viejos amigos, para junto analizar las causas que provocaron su derrota en estos comicios, mucho más sabiendo Villa cómo él ama su terruño y a su gente a los que hace presentes en cada uno de sus merengues.
Una fuente de entero crédito reveló que Vargas está tan disgustado con sus compueblanos por no haberle dado los votos ganadores que hasta ha llegado a pensar en mudarse de Villa Altagracia vender los perros y no hacer alusión a su gente en sus tradicionales merengues.
La fuente dijo además que Sergio está dolido con los suyos, y ha dicho que ellos lo maltrataron al no darle la preferencia y hacer que se quedara seis años más en su puesto como diputado, un puesto que, a su entender, solo utilizaba para conseguir que Villa tuviera buenos proyectos.
Según la misma fuente, Sergio Vargas está pensando cortarse el cabello dado que ya no tiene caso seguir pidiendo por un pueblo que le dio la espalda.
;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;;
No hay comentarios:
Publicar un comentario