Shawn Corey Carter mejor conocido como Jay-Z, reveló durante una entrevista con el director del diario The New York Times,
que parte de su éxito se debió al azar.
Era un muchacho que vivía en
los Marcy Projects de Brooklyn que para subsistir y comprarse cosas se
dedicaba a vender drogas, sin embargo, se salvó de una redada en la que
cayeron varios amigos cuando comenzó a probar con la música.
Ese
fue el punto de no retorno para que abandonara la venta de drogas y se
dedicara a la música. Hoy Jay-Z es el cantante de rap estadounidense,
aunque realmente cantar es lo que menos hace el hombre de negocios, más
rico con un valor que supera los mil millones de dólares, según Forbes.
¿Cómo está invertida esa fortuna?
Según Forbes, la champán de la marca Armand de Brignac,
de cual es propietario tiene un valor de 310 millones de dólares. Cada
botella de esta bebida conocida en el mundo de los lujos y la farándula
se vende a 300 dólares cada una su distintivo es el as de espadas.
Jay-Z también tiene un portafolio de inversiones por un valor de 220 millones entre los cuales se encuentra acciones en Uber por 70 millones de dólares.
Además del champán, Jay-Z invierte en el coñac D’Ussé el que tiene un valor de 100 millones de dólares.
El sitio de streaming de música Tidal, valorado en 100 millones de dólares, es otra de los negocios del artista.
Roc Nation,
su compañía de entretenimiento fundada hace más de 10 años, incluye
también una sección de representación de deportistas entre los cuales
están Kevin Durant y el manejo de artistas como Rihanna.
El valor de su catálogo musical es de unos 75 millones de dólares, y acumula obras de artes
por otros 70 millones de dólares, mientras que la inversión en bienes
raíces está valorada en 50 millones de dólares gracias a viviendas en
los exclusivos Bel Air, Tribeca y los Hampton.
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