El Show del Mediodía anunció con bombos y platillos que vendría renovado, muchos se adelantaron y creyeron en esa renovación ciegamente y en la primera entrega, cualquiera lo pensaría así pero luego de esta y otras entregas, se creyó que ciertamente seria como una nueva etapa la del Show del Medio Día, con Iván Mieses a la cabeza.
Tras 42 años en la televisión dominicana un cambio en la línea gráfica, redirección en los segmentos fijos y la inclusión de otros no caía tan mal una renovada propuesta del espacio que se transmite por Color Visión, canal 9, pero lamentablemente eso sigue siendo mas de lo mismo.
A modo de presentación se introdujeron los segmentos que se podrían disfrutar cada día. Algunos de los títulos que llevan las secciones son: “Buenas notas de arte”, “El mundo del espectáculo”, “Dicen, pero dicen”, “Al derecho y al revés”, “Vídeo hits”, “Viajera”, “Sin censura”, “Pequeños grandiosos”, “Ritmo joven”, entre otros que a diferencia de los viejos tiempos o anteriores programas en vez de dar alegría dan pena y tristeza.
Lo presentado diariamente en el nuevo Show del Medio Día, evidencia una real intención de aburrir al televidente en cada uno de los segmentos especificados pues en vez de cambiar la rutina se nos las arruinas a los espectadores.
Los conductores del programa, Arisleyda Villalona, Carolina Valenzuela y Robert del Castillo, al parecer no tienen el material suficiente para entretener al televidente por unos cuantos minutos debieran, dar la bienvenida y no aparecer nunca mas en la pantalla, Iván Ruiz, quien ha vuelto a ser parte de la producción, tiene un exceso de aparición en pantalla y de todo quiere opinar sin dejar notar tan siquiera que en verdad tiene el conocimiento para involucrarse.
Los artistas que esta llevando la nueva producción del Show del Medio Día, no están a la altura del espacio pues tanto los grupos como los presentadores del espacio no le imprimen el ritmo a la ocasión, ni uno ni otro le dan el ambiente a la situación y no es que los presentadores se conviertan en un Marcos Miguel, ni en un Yaqui Núñez del Risco, tampoco en un Daniel Días Alejo, pero tampoco a un Aguiló, por solo hacer mención de algunos pero la alegría de los dominicanos no puede continuársele entristeciéndosele.
El humor del Show del Medio Día, en vez de derrochar alegría derrocha lagrimas a los televidentes pues ya a Margaro, se le apago la chispa al igual que a mayoría de sus compañeros comediantes, Robert del Castillo, podría ser el mejor locutor del mundo pero no para estar en la televisión dominicana ni como animador del Show del Medio Día, una verdadera escuela del arte y la comunicación en
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